Codo, un pequeño municipio de la comarca Campo de Belchite en Zaragoza, ha comenzado a destacar por su compromiso con la sostenibilidad y la regeneración ambiental. A través de proyectos locales impulsados por el Ayuntamiento, la ciudadanía y entidades externas, el pueblo está demostrando que incluso en entornos rurales con pocos recursos se pueden generar impactos positivos a largo plazo.
Granja El Prau: de escombrera a motor de empleo rural
Una de las iniciativas más innovadoras es la transformación de una antigua escombrera en una granja de gallinas camperas, conocida como Granja El Prau. Este proyecto busca generar empleo local, fijar población en el entorno y recuperar un espacio degradado mediante reforestación y mejora paisajística, un modelo de economía circular aplicada al medio rural.
Concienciación ambiental ciudadana
Otra acción destacada proviene directamente de la ciudadanía. Un vecino de Codo inició una campaña personal contra los vertidos ilegales recogiendo residuos de las cunetas y colgándolos en los árboles, como forma de denuncia visual. Esta intervención, tan simbólica como efectiva, generó conciencia y motivó la participación de otros vecinos, dando pie a una limpieza activa del entorno.
Protección de la biodiversidad: El Planerón
A pocos kilómetros del núcleo urbano se encuentra El Planerón, una reserva ornitológica incluida en la Red Natura 2000. Con más de 700 hectáreas, este espacio protegido es vital para la conservación de aves esteparias y ecosistemas únicos en la región. Codo desempeña un papel relevante en la preservación de este entorno.
Energía renovable y eficiencia energética
El municipio también ha comenzado a dar pasos importantes, adjudicando la instalación de una planta solar en una nave municipal, una apuesta por las energías renovables a nivel local