Villanueva de Oscos
Villanueva de Oscos es un concejo del occidente de Asturias, con una extensión de 72,7 km2 y una población de 263 habitantes. Forma junto con San Martín y Santa Eulalia La Comarca de Los Oscos, galardonada en 2016 con el Premio al Pueblo Ejemplar de Asturias, producto de que sus vecinos han sido capaces, en las tres últimas décadas, de articular un plan colectivo que combina equilibradamente tradición y modernidad, aunando la conservación de la naturaleza y el patrimonio cultural con el desarrollo económico basado en la ganadería y el turismo rural. Villanueva forma parte además desde 2007 de la Reserva de la Biosfera del Río Eo, Oscos y Terras de Burón (la única Reserva de Asturias que tiene costa y que comparte territorio con Galicia), muestra de una naturaleza privilegiada donde la ausencia de contaminación se ve reflejada en los líquenes de sus bosques de roble, castaño y abedul y en sus ríos cristalinos donde habita la trucha y la nutria, y forman numerosas cascadas (“seimeiras”). Habituales también son los jabalís, corzos, zorros, lobos y el alimoche, y con regularidad hace su visita el oso.
La villa de nuestro concejo se aglutina en torno al impresionante Monasterio de Santa María, del que podemos visitar varias zonas, entre ellas el claustro, aparte de la Iglesia con la cual forma el conjunto monástico, permitiéndonos conocer su historia y la influencia en toda la zona. Se erigió en el XII (1182), alojando el primitivo edificio primero a los monjes de la Orden Benedictina y posteriormente a los Cistercienses. Varias remodelaciones y ampliaciones en los siglos XVII – XVIII han alterado su estructura.
Pueblo candidato a
Premio Mejor Pueblo Agrícola
Uno de los sectores principales en Villanueva de Oscos es la actividad ganadera, favoreciendo la proliferación de abundantes pastos su enclave montañoso. En nuestro concejo hay dos actividades señaladas de vacuno, la producción de leche y la cría de ganado destinada a su posterior venta en el mercado, destacando también la actividad caballar. Cabe reseñar la gran acogida que han experimentado entre algunas explotaciones la ganadería ecológica, y actividades como la apicultura que, si bien es de tradición familiar y va pasando de generación en generación se va profesionalizando, surgiendo pequeñas explotaciones.
Destacables son las Ferias de Santa Ana y San Miguel que se celebran anualmente en el Puerto de La Garganta desde tiempos inmemorables, y que persisten prácticamente intactas en el tiempo a pesar de los diferentes contratiempos del pasar de los años. Tienen lugar el día de Santa Ana (26 de Julio), y el día de San Miguel (29 de septiembre), esta última siempre que coincida en fin de semana, si no se traslada justo al domingo anterior a la fecha.
Estos tradicionales encuentros entre los ganaderos de Asturias y Galicia, reúnen asimismo tratantes de ganado, pulperías, bares, puestos de venta de productos tradicionales, agroganaderos, alimentación, artesanía y textil. Habitualmente se superan las 200 cabezas de ganado en total, siendo mayor la representación de vacuno que la caballar. En cuanto a expositores se suelen reunir alrededor de medio centenar entre los puestos de venta, bares y pulperías.
El enclave de la feria es único y privilegiado para el disfrute de la naturaleza, las tradiciones y los productos tradicionales. Siendo típicas las comidas al aire libre, el asistir desde La Comarca de Los Oscos o zonas cercanas a caballo y el poder disfrutar de la música tradicional a cargo de algún músico local.